Por Aurora Gámez Enríquez
Memoria del corazón
Touria Majdouline
Valparaíso Ediciones (GRANADA, 2023)
Traducción de Rajaa Dakir
No soy sombra de nadie,
soy arco de alegría.
Touria Mjdouline
Touria Majdouline, es una poeta decidida y valiente, con la palabra precisa y el alma puesta en cada verso nos ofrece un poemario memorable: Memoria del corazón, destinado sin lugar a dudas a perdurar en el tiempo, a embellecer nuestros corazones lectores con la más alta percepción lírica. Ya en el prólogo, el poeta y escritor José Sarria, nos dice de ella: “La palabra en la soledad de su riqueza y de su diversidad, austera a la vez que solemne, ciclópea, erigida como un altar donde la imagen se sustenta y milagrosa fluye ante los ojos del lector.” (p.11). La autora, con estilo propio, y gran sabiduría en el decir, nos va conformando un poemario delicioso. Emociones y sentimientos universales que llevan desde una reafirmación del yo en el poema MUJER LIBRE: “Esta soy yo, / mujer totalmente libre. / ¡Y pienso maldecir el presente también! / Y convertirme en una isla / o una tarde./ No tengo sueño/ sino el de morir con orgullo.” (p.18) Se percibe un sentimiento profundamente sórico[1], de hermandad, que nace con estos versos, pues ¿quién no quiere ser libre? Una reivindicación natural en el ser humano desde que tiene conocimiento de su existencia. Las mujeres podemos percibir con alegría y cierto orgullo de género que otras han proclamado nuestros derechos de ciudadanas libres. Abierta esta puerta importante al pensamiento crítico se transita por los versos del poemario con verdadera pasión lectora.
Otros poemas nos transportan con el pensamiento en flor a los lugares comunes del sentimiento, esos que nos habitan y nos conmueven profundamente. Es el caso de EL PAÍS QUE…: “Me siento en el vacío, / pongo el país sobre el ala de un poema / y derramo lo que queda de la sal de mis lágrimas / en mi camino hacia ti, / hacia él.” (p.21)
Experta Doctora en Crítica y Artes Modernas; la profesora Touria Majdouline sabe bien lo que se trae entre manos, es el dominio de la palabra su especialidad y con ella nos hace saber recreándonos largamente en la MEMORIA DEL CORAZÓN: “Y así estoy, / tropezando con los recuerdos / en la puerta del límite supremo.” (p.27)
Lo vuelve a hacer con gran sencillez y la dulzura en NADA MÁS HERMOSO: “¡Ven! / Hagamos otro comienzo, / eliminemos todos los motivos del adiós,” (p.34)
Profundamente observadora empatiza con la otredad y crea un personaje misterioso y nos narra una historia melancólica y triste en el poema ¡SI SÓLO SUPIERA…!: “Se sienta asustado / de las picaduras de la soledad, / en la esquina lejana / del pequeño café parisiense,” (p,42) Me pregunto, ¿se desdobla? ¿piensa en su amado después de años de ausencia? ¿visualiza un futuro posible? o sencillamente observa a un hombre en su melancolía. Destaco estos versos donde se resiste al olvido de la persona amada con una intensa emotividad, don del poema SUEÑO: “Ultimaré esta noche / con media luna / y con lo que queda de las nubes de la imaginación / no apagaré la vela de tu ausencia. / Ella sola me ofrece / la rosa de la noche.” (p.53) Cuanta hermosura arranca a la ausencia de un ser querido, cuanta fuerza da para alzarse ante la adversidad. Su alma rebelde no se conforma, abre la herida y nos presenta ELOGIO DEL ABANDONO: “Traiciono mi corazón con el olvido. / Soy mi futuro / y el instante es mi residencia.” (p.58)
La certeza de que somos viajeros de paso en esta vida, de que hemos de ir ligeros de equipaje como decía el poeta Antonio Machado, queda reflejado con gran belleza en estos poemas que nos ocupan. Pero lo que más me gusta es que no se deja vencer por la melancolía, toma la vida alentadoramente y nos lleva de la mano con el corazón en vuelo ARCO DE ALEGRÍA: “Viajo siempre / en el viento, / sin equipaje. / A mi lado sólo está / mi sombra / alimentándose del árbol del silencio.» (p.62) Con dulzura y delicadeza, el mensaje es acertadamente asertivo y valiente: “No soy sombra de nadie, / soy arco de alegría. / Dejo mi memoria / al viento, / dibujo los placeres del rocío / para el cuerpo sedoso.” (p.63)
Este poemario de sutil y profundo sentimiento, está en el camino de una búsqueda personal, bellísimamente trazado para disfrutar de un estimulante pensamiento humanista. Tauria Majdouline nos lleva felizmente de la mano a su universo particular altamente filosófico y lírico. Memoria del corazón enamora con un verso significativo y veraz, transmite fortaleza ante cualquier situación y alienta la vida con decidida pasión: “Me invito a bailar.”
He de señalar el acierto en la selección de los poemas que componen el libro, en la disposición de cada uno de ellos, que nos cuenta una historia por sí misma. Este paseo emocional y dialéctico nos abraza y conduce de la ensoñación al desamor, de la dulzura al amor, de sí misma a la otredad. Así pues, después de Arco de alegría, una explosión de color y esperanza, ultima con el poema INSOMNIO, “donde el racimo de la pasión / me trasiega el vino del dolor.” Con este poema nos arrastra magistralmente y de nuevo, al desasosiego, a un querer amar con los ojos abiertos, dolerse con la evidencia del desamor y desapegarse por fin para sanar: “Te mantendré en el sueño / y saldré de él.” (p.66) Versos que transmiten determinación y firmeza, a la vez que mágica vulnerabilidad y sutil belleza. ¡Sublime!
El libro, Memoria del corazón, de Touria Majdouline, con prólogo de José Sarria, está editado en español por Valparaíso Ediciones en la Colección de poesía, en Granada (España), 2023. Traducido por Rajaa Dakir, Profesora de Literatura Latinoamericana y de traducción en el Departamento de Hispánicas, Facultad de Letras y Ciencias Humanas-Ain Chock, Casablanca.
Touria Majdouline. Poeta y escritora marroquí. Doctora en Crítica y Artes Modernas. Profesora de la Universidad Mohamed V, Facultad de Letras de Rabat. Exsecretaria General de la Comisión Nacional Marroquí de la Educación, la Cultura y las Ciencias (UNESCO) y miembro de la Casa de la Poesía de Marruecos. Ha obtenido el premio de poesía “Mazik El Malaika” en 2011 (Ministerio de Cultura de Irak) y el premio ESESCO de la Cultura en el 2012. Ha publicado los poemarios: Hojas en ceniza (1993), Los cansados (2000), Un cielo que se me parece (2005). ¿Qué memoria te basta? (2008), Más allá de la distancia (2015) y Nada más hermoso (2023). En crítica literaria ha publicado: Dinámica de la acción dramática en el teatro (2005) y Visión y máscara (2016).
[1] Sórico: de sororidad, solidaridad entre las mujeres, hermandad.